España y la lucha entre Oriente y Occidente


La tesis fundamental de este último libro del Dr. Sáiz Barberá Oriente contra Occidente, obra arrolladora, fatalista y optimista a la vez, escrita con el apasionamiento y erudición característicos de este prolífero autor, defensor acérrimo de las virtudes del espiritualismo español y de lo que Vasconcelos llamó " raza cósmica" formada por la mezcla de españoles con hispanoamericanos, es que Europa - Occidente - perece por el materialismo y abandono del cristianismo. Frente a Occidente se alza, como ya profetizara hace más de cien años el colosal vidente extremeño Donoso Cortés, el poderío socialista de Rusia. Pero, ante estas dos fuerzas y poderíos que acabarán sucumbiendo en una deflagración nuclear, surgirá con su poderosa "raza cósmica" vasconceliana, España, con su revitalizado espíritu católico, formador del más grande imperio que conociera la historia.
"El siglo XXI - dice el doctor Sáiz Barberá - , verá el despertar de la raza hispánica (cósmica) que fundada en el cristianismo con su espíritu inmortal y trascendente, desde que se fecundó con la venida del apóstol Santiago a España, ha sido siempre fiel a las verdades y consignas eternas".
Para llegar a esta conclusión del trascendentalismo español o hispánico, el autor analiza a lo largo de este denso y muy importante libro suyo cómo se produce la decadencia de las razas predominantes en la historia de la humanidad y cómo llegó el fin de sus culturas y civilizaciones. A lo largo de sesenta y cuatro capítulos que vienen a ser en su conjunto en cada uno de ellos una síntesis historiográfica y sociológica de las naciones y de los pueblos, el doctor Sáiz Barberá, sin perder el hilo principal de su tesis, hace desfilar por sus páginas resúmenes perfectamente didácticos del pensamiento y de las obras de prestigiosos historiadores y filósofos, desde Van der Meer, Spengler, Burchardt o La Serene, a Torqueville o Toymbee, pasando por Guenon, Belloc etc como prueba de la profunda erudición del autor que desarrolla su pensamiento sobre el fin de las civilizaciones, basándose en una documentación historiográfica y científica acreditada y prestigiosa, apoyada principal y fundamentalmente en textos - por más asombrosos por su contenido profético - de Donoso Cortés, a quien el doctor Saíz Barberá parece conocer casi de memoria, no en vano también viene a constituir el pedestal de su ideario y pensamiento filosófico en cuanto al papel salvífico que a España ha de corresponder en el mundo futuro del siglo XXI. No menos apoyo a las tesis del autor le prestan las obras de Balmes, Berdiaeff, De Maistre y Cornot, a los que el doctor Sáiz Barberá considera (con Donoso Cortés, por supuesto) como los cinco grandes filósofos cristianos de la historia, y a los que estudia con auténtica minuciosidad y precisión en uno de los más brillantes y definitivos capítulos de esta, por ahora, última e importantísima obra suya.
Ese destino salvador de España es el mismo, según recuerda Sáiz Barberá que preconizaba Ernesto Giménez Caballero en su portentoso libro "Genio de España", que decía que España debe volver a Europa, no a mendigar, sino a ofrecer y a dominar porque el español nació para mandar. Esto es una actitud en absoluto contraria a la lismosnera de esta democracia fracasante que padecemos.
Ahora bien, de acuerdo con la teoría que desarrolla tan apasionada como eruditamente el doctor Sáiz Barberá, antes de realizar su destino ineludible, España debe sacudirse el yugo de la politicrastería. Y a tal efecto, el autor recuerda lo que un día en la primavera de 1.925 dijo Alfonso XIII a un escritor extranjero:" En España tenemos de cinco a seis mil politicastros. Para ellos el parlamentarismo es un ideal intangible, ¡ que perezca la nación antes que los parlamentarios! Frente a ellos hay veinte millones de españoles completamente indiferentes a las maniobras políticas, que no reclaman más que la seguridad del trabajo y el respeto para sus bienes. ¿Vamos a sacrificar a veinte millones para complacer a seis personas?
A lo que Sáiz Barberá hace el siguiente comentario: "Liberales eran aquellos polticastros del año 25, liberales y socialistas son los que en 1.984 opinamos se contentarían con que España jugase un papel modesto y discreto en el mundo del futuro, un papel semejante al de Grecia".
Prosiguiendo su análisis de la lucha a muerte entre Oriente, Rusia y Occidente, Europa, el autor cita el texto de Belloc según el cual "O Europa vuelve a la fe cristiana o perece". Texto al que añade este otro no menos alarmante de Berdiaeff: " O el cristianismo integral". Y aún añade esta otra estremecedora de Donoso Cortés: "O el comunismo totalitario, o la verdad católica dirigiendo los destinos de Europa como en otros tiempos, o la revolución socialista triunfará en Ocidente".
A estas severas admoniciones de los Donoso Cortés, Belloc, o Berdiaeff, el doctor Sáiz Barberá contrapone textos de confianza y fe en el triunfo del espíritu y el catolicismo. Recuerda el pensamiento filosófico de Leclerq en su obra Filosofía e Historia de la Civilización condensado en la tesis de que "estamos viviendo un momento de la historia en la que termina una fase materialista y en la que alborea un renacimiento religioso". Por su parte, el propio autor , insiste una y otra vez en este libro suyo, su confianza, su fe absoluta, mejor dicho, en que prevalecerá sobre el materialismo que asuela Occidente en la actualidad el Cristianismo y la raza cósmica hispana: "La técnica por avanzada que sea es materia y la materia siempre muere. El espiritualismo es inmortal y levantó en el siglo XVI el más grande imperio que haya existido en la humanidad e irrumpirá de nuevo ene l siglo XXI para abrir en la historia de la humanidad otra andadura de la esperanza y de la salvación. ¡España y América del Sur tienen la palabras!
De ahí que, ya al fin de esta apasionante última obra suya el doctor Sáiz Barberá haga "un llamamiento a la raza hispánica a través de la exposición del Genio de España que brilló ardientemente en todos los apologistas españoles de los siglos XIX y XX". "Es la España - continúa - cuando sean barridos del área nacional los enemigos de la religión y de la patria, el genio de España volverá a realizar y continuar su gigantesca obra secular: el descubrimiento de América que hay que llevar la fusión de la Madre Patria para que el siglo XXI pueda ofrecer a las naciones el inmenso mundo cristiano del imperio hispanoamericano. ¿Adelante hacia el catolicismo, y roma es la sede de la verdad cristiana!" Palabras de fe ardorosa que recuerdan las de un Vázquez de Mella, un Aparisi Guijarro un Menéndez Pelayo. Palabras alentadoras como las de todo este extraordinario libro, optimista, esperanzador para un futuro español e hispano, ecuménico universal.

Inicio
Historia de España